La artesanía yucateca
Cada persona ve el mundo
en una manera diferente y, por eso, no es una sorpresa que cada persona
encuentra cosas diferentes ser bello y, como resultado, define el arte, o lo
que se piensan es hermoso, en tantas maneras. El hecho es que mientras algunas
personas pueden admirar un cuadro en un museo hay otras quienes pueden admirar
grafiti en el costado de una pared. Además, los dos son obras de arte por cada
persona. Mientras la caricatura debajo no trata del arte, sí, muestra como una
cosa puede ser vista en varias maneras y, además, es muy cómica.
Pero no voy a hablar
sobre el arte en general porque cuándo pensaba en el arte que era única a la
Yucatán la mayoría del “arte” que venía a mi mente sería más como la artesanía.
Pero, me preguntaba ¿qué exactamente es la diferencia entre el arte y la
artesanía? Y, quizás aún más importante, ¿es la artesanía aún un tipo de arte? Empecé a averiguar más sobre este tema y leí
varios artículos para apoyar mis declaraciones.
Para empezar yo pienso
que es importante definir ambos términos. Según definicion.de el arte es “el concepto que engloba todas las
creaciones realizadas por el ser humano para expresar una visión sensible
acerca del mundo, ya sea real o imaginario” y, como la definición sugiere, está
interpretado en muchas maneras diferentes. Algunas definiciones dice que la
artesanía “es un tipo de arte en el que se trabaja fundamentalmente con las
manos, moldeando diversos objetos con fines comerciales o meramente artísticos
o creativos,” pero ¿cómo es posible hacer algo por “meramente artístico” cuándo
es “con fines comerciales”? La respuesta, en mi opinión, es que no es posible.
Así que mientras sí, hay
diferentes tipos de arte, en general, cuándo el dinero toca un papel en el arte,
cambia a ser otra cosa completamente; llega a ser la artesanía. De hecho
algunas personas creen que cuando los artesanos dejan de hacer obra de autor y
pasan a atender las peticiones de los clientes, deja de ser arte completamente
y llega a ser la artesanía, que es, según Francisco José Súñer Iglesias, “la
prostitución de la cultura.” Personalmente, pienso que la prostitución es demasiado
negativa, porque la artesanía es muy importante a muchos estados incluyendo la
Yucatán y, por supuesto, no es una cosa mala, pero también pienso que un
artista verdadero crea sin demanda para poder expresarse y comunicar algo al público
y el artesano, por el contrario, crea bajo demanda, con la intención de ganar
dinero y esta demanda es lo que hace la separación más fuerte entre ambas
obras.
No es decir que una es
mejor que la otra, sino que son dos cosas muy diferentes. Por ejemplo, en el
centro de la Yucatán hay literalmente miles de tienditas del “arte maya” dónde se
venden cosas como tejidos, hamacas, máscaras, ropa, esculturas, pinturas,
blusas, pulseras, cinturones, bolsas bordadas y mucho más, todos hechos a mano.
Pero, en las palabras de Julio Flores, el arte está concentrado en “hacer
piezas u objetos únicos e irrepetibles” y la artesanía “no es arte porque se producen
piezas en forma serializada [y] casi idénticas” y tengo que decir que tiene
mucho sentido. Así que aunque todos los artículos en el centro son bonitos no
son obras de “arte” por ser hechos para vender y porque no son únicos.
Entonces, ¿por qué es la
artesanía en la Yucatán tan popular? Pues, lo interesante sobre estas obras no
es la individualidad de la obra sino, lo que mencioné antes, la individualidad
de la cultura. Así que las varias tiendas en el centro que venden solamente
blusas bordadas pueden tener éxito porque hay una demanda para la artesanía
yucateca especificamente. Porque, mientras las obras no son únicas en el
sentido que solamente hay una copia en el mundo, sí, son únicas en que
solamente la artesanía de la Yucatán demuestra la fuerte cultura de los mayas. Esta demanda actualmente empezó en los tiempos
coloniales porque cuando llegaron los españoles los mayas ya estaban haciendo
sus hamacas, cerámicas y mucho más a mano por necesidad. Pero para los españoles
las cosas cotidianas para los mayas fueron una novedad. Igualmente, hoy en día
el simple hecho de que en un mundo tecnológicamente avanzado todavía hay gente
que hace cosas a mano atrae la gente. Además, las tradiciones de los mayas han
sido transmitidas por generaciones y, como resultado, las artesanías yucatecas hoy
en día llevan una historia y una cultura con ellas.
Desafortunadamente,
porque este mundo es tan avanzado tecnológicamente más y más los artesanos han
empezado introducir máquinas en el proceso de hacer estas obras. Por ejemplo,
las blusas bordadas son muy populares aquí en la Yucatán y, mientras hay algunos
lugares donde todavía es completamente a mano, también hay lugares dónde están
bordadas a máquina. Lo triste es que la artesanía pierde aún más autenticidad con
el uso de esas máquinas pero, porque son más baratas, los artesanos reciben más
negocio. Un vestido bordado a mano puede cobrar hasta mil pesos o más mientras
un vestido bordado a máquina se cobra hacía dos cientos pesos. La decisión es
obvio ¿no?
Así que es muy claro que
el arte y la artesanía son dos cosas muy diferentes y mientras la artesanía no
es un arte por definición, tiene su propia identidad y su propia apelación. Son
las tradiciones de la cultura maya y el trabajo que tradicionalmente se hacía
todo a mano que atrae la gente. Si se compone de estas dos cosas ¿qué pasará cuando la tecnología
de hoy reemplace el trabajo a mano y, al hacerlo, pare años de tradiciones? ¿Luego,
que sería la artesanía y más, qué sería la apelación de aquellas obras? Personalmente,
espero que nunca tengamos que averiguar.
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